viernes, 29 de junio de 2007

Madrí, Madrí, Madrí

Eso dice el "chotís". Y es mucho Madrid. Viniendo desde fuera me doy cuenta de que me he desacostumbrado al tráfico, a los ruidos, al lío de vivir en una capital que no es precisamente limpia ni ordenada, aunque tiene el encanto de un poblachón grande que ha crecido sin mucho tino.

Paso un rato en una librería, paseo después por Chueca y aledaños viendo el ambiente, quedo con un amigo, hacemos unas compras, nos vamos a otra parte en la que poder comer sin tanto jaleo. De postre entramos en dos papelerías y compramos un par de estupideces que nos van a recordar este día: un cuaderno, unos tinteros.

De vuelta a casa (lo fue en tiempos porque yo nací en este poblachón) leo un par de horas, sin interrupción. Escribo un rato, de aquí sale algo, seguro. Luego me conecto. Compruebo que los amigos han pasado por esta bitácora y han dejado mensajes de aliento. Lo agradezco, me emociona la presencia de, sobre todo, esa gente que, como dice uno de ellos, sólo intuyo. Pero sé que están ahí.

Escribo estas líneas. Dentro de un momento daré la orden de "publicar entrada". Luego, a dormir, quizá con un poco de música para dejarme ir por esta noche.

No sé, a veces la vida (o quizá siempre) consiste en estas minucias que la llenan y nos ofrecen lo mejor de sí y nos ponen en contacto con los otros. O con la ciudad que me perteneció un día, Madrid, Madrid, Madrid y que hoy he recobrado momentáneamente. O con esa luna llena que la preside esta noche.

(del diario de un jardinero, ¿es julio ya?, de 2007)

11 comentarios:

amart dijo...

Es que el poblachón imprime carácter. Si lo hace con quienes acuden a él sin importar de dónde, cómo no a quienes fuimos paridos aquí. Llevamos, creo, ese marchamo tan invisible como imborrable, que nos hace amarlo a nuestra manera, aunque ya no estemos en el censo, aunque lancemos improperios por el tráfico imposible, aunque estemos deseando salir... para que llegue antes la necesidad de volver.
Un abrazo.

Neves de ontem dijo...

Siento no estar de acuerdo con vosotros, a mí Madrid me produce siempre un gran desasosiego.

FPC dijo...

amart, estamos en lo mismo.

neves: no es que no lo produzca, que lo produce. Es que cuando es tu pueblo de toda la vida y has vivido en él más de cuatro décadas... ¿qué pesa más, el desasosiego o la sensación de hallarte en casa, que aunque incómoda, es la tuya?

Abrazos.

Neves de ontem dijo...

Comprendo que sientas eso y que Madrid sea o haya sido tu casa, yo no he sido capaz de sentir eso allí nunca, será mi mirada sobre la ciudad, pero siempre me he sentido una extraña a punto de perderse. Esos sentimientos los tengo con Salamanca, que nunca me produjo ningún desasosiego, de donde me fui por motivos personales pero que sigue estando en mis sueños y donde un día volveré. Saludos.

Anónimo dijo...

Buenos d�as.
Madrid tiene todo lo bueno y malo de una gran ciudad, tambi�n tiene horas y espacio de enormes silencios, es una ciudad viva y �gil, nada tiene que ver con Salamanca por supuesto, hay �pocas del a�o donde la ciudad vegeta, parece que est� muerta.
Aqu� no hay tiempo de aburrirse.
Madrid,Madrid, Madrid..

Saludos

momo dijo...

Yo también me alegro, que hayas disfrutado por aqui.
Recién te estoy descubriendo, desde Madrí

FPC dijo...

Pues bienvenido seas, momo.
Saludos

Neves de ontem dijo...

Luna,no tiene que ver con aburrirse o la posibilidad de realizar actividades diferentes. Nunca he estado apegada a los lugares, ni he tenido sentido de pertenencia, mas bien me he identificado con un cierto desarraigo que marcaba mi carácter y que me hacía no conocer la nostalgia física, sin embargo llegó un momento en que sentí "saudade" de las piedras salmantinas.
Ya decía Machado que se canta lo que se pierde.

Anónimo dijo...

Neves, estudié dos años en Salamanca, entiendo lo que sientes, quería decir que cuando pierde el ambiente estudiantil, es una ciudad seca, árida y adusta,igual que cualquier tierra de Castilla.
Me gusta visitarla un par de veces al año ¿hace mucho que no vas? está preciosa y límpia y en la plaza mayor, se sigue paseando igual que hace años.

FPC, perdona la intromisión, he leido lo de los jardines españoles y veo que en Madrid, pones los jardines del Moro y el botánico, te falta uno que abrieron hace, creo, un par de años El Capricho, está en La Alameda de Osuna, es espectácular, si vienes, deberías visitarlo y si lo crees conveniente añadirlo.
Tiene miles de almendros y cuando florecen a nadie deja indiferente.

Gracias y perdón.
Saludos

FPC dijo...

Buscaré, luna (y de intromisión, nada) la página web de El Capricho, un jardín que conozco muy bien.

Pero, perdóname tú ahora, creo que te equivocas de jardín. El que tiene un almendral fantástico es la Quinta de los Molinos, que también conozco muy bien. Si no te equivocas, acláramelo porque yo en El Capricho no tengo registrados muchos almendros.

Bienvenida y gracias por tus comentarios. Saludos.

Anónimo dijo...

El cansancio de toda la semana.

Tienes razón, es el de la Quinta Los Molinos.
En El Capricho está El Laberinto.

Me gusta visitar los jardines, no me gustan los palacios ni las grandes mansiones.

Buen fin de semana.
Saludos